
Con un estilo sencillo que evoca con la misma maestría el sabor del Caribe y los sentimientos de sus protagonistas, la autora funde la realidad política (los enfrentamientos entre cubanos y españoles, la influencia de Estados Unidos), con la vida social y cotidiana de unos personajes sobre los que querremos conocerlo todo.
La fertilidad de las manos de Serafina, el padre autoritario, los varones administradores de las fincas y las mujeres dedicadas a la crianza de los hijos, las bodas impuestas y las innumerables pasiones son algunas de las piezas que se unen para tejer una historia irresistible, emocionante, llena de color e imposible de olvidar.
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